Desde hace un mes, Lorna Cepeda cambió el frío bogotano por el porteño. Ahora vive en un inmenso apartamento, ubicado en el Barrio Parque, en la zona de Palermo (una de las más exclusivas de la capital), junto con sus tres hijos: Daniela, Nataniel y Mariano, y Diosa, la nana de los pequeños. Es un barrio rodeado de parques y allí la encontró ALÓ.

Aunque no es el ama de casa perfecta, le dará vida a Lynette (papel que hace la actriz Felicity Huffman, en la popular serie). Con la calefacción al máximo, arrunchada con sus hijos y enfundada en un grueso saco, la bella cartagenera confiesa que se reencontró -ella vivió en el 2003 en Argentina- con el característico 'che boludo', con el dulce de leche, el buen vino y los saludos de los transeúntes que todavía le gritan 'Peliteñida'.

Apenas está organizando el apartamento y acaba de conseguir el colegio de sus hijos. Sin embargo, desde ya se siente como en casa y anhela el éxito laboral -así como lo consiguió en Betty-, sueño que comenzó a desdibujarse el año pasado con el fracaso de la telenovela La Diva.

Un papel protagónico para una producción internacional, vivir en una ciudad fantástica y el amor de Camilo Díaz, completan hoy el escenario de su nueva vida.

¿Cómo llegó Lynette?

Estando en Bogotá, fui a un casting de la película La hija del vallenato y, ese mismo día, me llamó Alberto Santini -ejecutivo de Univisión- y me dijo que me querían en la serie. Yo les dije que iba para Los Ángeles, a pasar unos días con mi hermana Angie, y nos encontramos allá.

¿Cómo fue el casting?

Me tocó improvisar. Apenas llegué, me dieron los libretos; afortunadamente, tengo una memoria privilegiada. Iba supersexy y me tocó taparme, porque Lynette es una mujer muy clásica. Me ajusté una pañoleta al cuello, me recogí el pelo y les pedí tomas cerradas.

¿Cuándo le confirmaron el papel?

Al mes hicimos la negociación y viajé hace 25 días. Estoy superfeliz porque es un megaproyecto.

¿Veía la serie?

Nunca vi la primera temporada, pero sí la segunda y la tercera. Me encanta y es una suerte haber sido elegida para el personajeque más me gusta.

¿Con quiénes trabajará?

Con Scarlett Ortiz (Todos quieren con Marilyn), Julieta Rosas y Ana Serradilla.

¿Cuál es la sensación de regresar a Argentina, después de cuatro años?

Volver a Buenos Aires es como regresar a mi casa. Adoro estar en mi país, pero me siento muy cómoda aquí.

Del amor y otras tristezas

¿Cómo recuerda a 'La Diva'?

Tengo agradecimiento a Jorg Hiller, Andrés Marroquín y mis compañeros de la novela. A nivel personal, la producción me ayudó un montón; aprendí y crecí mucho.

¿Por qué no funcionó?

Era una novela bonita, chistosa, pero le fue pésimo en rating. No le dieron chance.

¿Se deprimió?

Pensé que le iba a ir superbien y, cuando salió, me di cuenta de que no. Sentí pesar, pero entendí que eso es puro ego.

¿Después se tomó un tiempo de receso?

En diciembre tomé la decisión de hacer cosas que me interesaran realmente. No iba a trabajar por plata. Quería que el trabajo me llenara el alma. Me tentó Okupas, pero decidí salir de Colombia un rato.

¿Y su novio?

Me cayó de sorpresa en estos días. Yo estaba observando por la ventana y cuando miré al baño, él estaba parado, ahí. Casi me da un infarto.

¿Está enamorada?

Sí, estoy feliz y viviendo el día a día; no sé qué vaya a pasar en el futuro, pero ya no me angustia. Estoy enamorada, aunque no me gusta hablar de eso; se dijeron muchas cosas de mí cuando empezamos a salir.

¿Y cómo manejan la distancia?

Mientras se tenga algo fuerte, uno se va amoldando y va viendo cómo se maneja la relación.

¿Qué dice su 'ex' esposo (Eduardo Paz) de la distancia con los niños?

Desde hace cuatro años, cuando nos divorciamos, no hablamos mucho de nuestras vidas privadas. No nos interesa nuestra vida personal, sino los niños. Igual, él sabe que ellos están bien y todoestá en armonía con él.

¿Cómo le ha ido organizando la casa?

Han sido cuatro semanas agitadas, aunque llegué a un lugar amoblado. Lo único complicado fue buscar el colegio de los niños,porque aquí ni existe el candelario B. Pero lo encontré.

¿Aún la persigue 'La Peliteñida'?

Sí, claro. Todavía me reconocen así en la calle. En los restaurantes, los meseros me molestan con el personaje... La gente no la olvida.

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